El Estado del Bienestar surge del intento de hacer el bien con el dinero de otros. Estas iniciativas siempre fracasan porque nadie gasta el dinero de los demás con tanto cuidado como el dinero propio. Quienes gastan el dinero usan la fuerza tanto para ingresarlo primero como para asegurarse de que quiens lo reciben lo usan para los objetivos que consideran correctos. Las buenas intenciones se corrompen por utilizar malos medios. Friedman visita EEUU y Reino Unido.