Un grupo de alumnos organiza un campamento que es financiado por la Fundación. Ante la necesidad de contar con adultos responsables del contingente, Esperanza y Tomás son designados para cumplir esta tarea.
Eva está cada vez más celosa de la relación que une a la novicia con el sacerdote. Y decide hacerse presente en el camping, con la sola intención de controlarlos… además de aprovechar la ocasión para mortificar a Esperanza, a quien ve como “la enemiga a vencer”.
Mientras tanto, Lola y Pedro -quienes también forman parte de los “excursionistas”- se apartan del grupo para compartir un tiempo a solas. Por supuesto, no dan aviso a nadie de su “travesura”.
Preocupados, Esperanza y Tomás comenzarán a buscarlos a través del bosque. Los hallarán charlando animadamente….y muy próximos a besarse. La tierna escena despertará sentimientos encontrados entre nuestra heroína y su amado sacerdote. Y un cruce de miradas un tanto incómodo entre ambos bastará para confirmar lo que sienten…
Esperanza y Tomás acompañan a un grupo de alumnos a una escapada. Hacia allí también irá Eva, con el fin de “controlar” la relación entre la novicia y el sacerdote. Sin embargo, nuestra heroína y su amado cura encontrarán el momento justo para “hablar de amor”.