En 1987, Gustavo Rivero intenta contactar al Capitán Augusto López Cabral, jefe de la compañía en la que prestó servicio en Malvinas. El recuerdo lo lleva al inicio de la guerra cuando debió embarcar y volar a las islas en Abril de 1982, dejando a su madre a merced de un padre violento.
En 1982, Carlos Federico Medina regresa a su hogar tras haber hecho el servicio militar obligatorio. Su madre lo cuida y apaña para que pueda hacer lo que mas ama: dibujar. En Malvinas, Medina tiene problemas para adaptarse y ser respetado por sus compañeros. Gustavo Rivero le da una mano y lo defiende. En su casa, Medina retrata a escondidas a la vecina que lo obsesiona y a la que no puede siquiera hablarle. Finalmente, consigue trabajo como dibujante en la revista “Humor” pero debe irse a Malvinas. Sin tener el valor para darle la noticia a su madre, se marcha sin despedirse.
En 1982, el Teniente Augusto López Cabral arriba a Buenos Aires para desempeñarse como instructor en el Colegio Militar. Tiene problemas con Teresa, su novia y en su intento por resolver la situación, le pide casamiento, pero es rechazado. Gustavo Rivero ve a su madre golpeada nuevamente e intenta matar a su padre. Peleado con su familia, Gustavo debe pasar la noche en lo de Irma, su novia, a quien le promete volver sano y salvo de Malvinas.
En 1982, Facundo Roggero, comienza a trabajar en la empresa de su padre. Intentando ganarse un lugar de poder, discute con un delegado sindical, desencadenando una profunda pelea con su padre. Facundo, teniendo la posibilidad de no hacerlo, decide ir a Malvinas para enfrentarse a su padre. En Malvinas, Facundo dispara sin querer a un soldado argentino y lo mata. López Cabral junto a sus hombres deben trasladar municiones a otro campamento. Facundo teme que descubran el cuerpo del soldado que mató. López Cabral recibe una comunicación de Teresa, está embarazada.
En 1982, Raúl Saslavsky, cantante lírico, sufre una convulsión durante una audición. Clínicamente está sano pero las convulsiones persisten,. su padre psiquiatra lo ayuda a enfrentar sus miedos. Raúl consigue el papel y canta en la ópera antes de partir. En Malvinas Suárez lo sanciona por robar una gallina. López Cabral intenta sacarlo de la sanción pero Suárez no se lo permite. López Cabral se ve obligado a defender la postura de Suárez frente a sus soldados. Pelea con Gustavo Rivero para dejar en claro quién es el que manda. Tras ganar, saca a Raúl del castigo y roba comida para que sus soldados no pasen hambre.
En 1982, Benito “Chapa” Gutiérrez roba autos para el subcomisario Maure. Pero movido por la ambición, un día decide trabajar por su cuenta, hasta que Maure, se venga matando a su hermano menor. Chapa debe viajar a las Malvinas dolido por lo que causó. En las islas, los soldados protagonistas se enfrentan a una patrulla inglesa, matando a un soldado y tomando prisionero a otro.
En Malvinas, Gustavo Rivero tiene un principio de “pie de trinchera” a causa de la humedad y el frio. Intentan curarlo en el hospital de Malvinas, pero ante la posibilidad que le amputen el pie, decide escaparse. López Cabral, comienza a tener miedo a morir y frente a la posibilidad de dejar a Teresa y al niño en camino, sin sustento, decide casarse vía radio.
En Malvinas, los soldados no tienen provisiones y padecen hambre. Deciden irrumpir en una casa Kelper y robar comida. Gustavo encuentra a Facundo junto al cadáver del soldado argentino que mató. Se apiada de su situación y lo incluye en el grupo para compartir la comida robada. Los soldados descubren un Unimog abandonado y lo usan como refugio para comer y dormir.
Los soldados regresan de su escondite al campamento y ven al campamento en estado de alerta. López Cabral les informa que partirán al frente de batalla. Un cura les da la última bendición y comienzan su marcha hacia el infierno.
Gustavo Rivero despierta herido y prisionero en Malvinas. La guerra ha concluido. Todavía extraviado e inconsciente, ve a López Cabral por última vez. En 1987, López Cabral lleva a Ana, su hija de tres años, a la casa de Teresa, ahora su ex mujer. Gustavo, afectado por los recuerdos de la guerra, pierde su trabajo en la fábrica. Tras buscarlos arduamente, se reencuentra con Facundo, pero este lo rechaza, le comenta que no quiere saber nada con Malvinas. Gustavo se acerca a López Cabral para pedirle ayuda, pero terminan discutiendo. Cabral se mete al mar para suicidarse.
Gustavo se reencuentra con Raúl y Medina. López Cabral cambia de opinión y decide ayudar a Gustavo. Al no encontrarlo en la casa se queda conversando con Irma. Gustavo regresa ebrio a su casa y al darse cuenta de lo ocurrido, la golpea. Irma decide abandonarlo y se va de la casa.
Gustavo va a pedirle perdón a Irma, pero ella lo rechaza. Luego se acerca a pedirle perdón a su madre, quien reacciona igual. Raúl le ofrece regresar a Malvinas, pero Gustavo teme que eso lo enloquezca más. Gustavo se reencuentra con Chapa y juntos robar una fabrica. López Cabral le propone volver a Teresa, pero ella no quiere. Medina reúne al grupo entero y le da una sorpresa a Gustavo.
Los cinco soldados se reencuentran en un bar y comienzan a hablar de lo ocurrido en Malvinas. Medina culpa a Gustavo de haberlo abandonado herido en el campo de batalla. Gustavo no recuerda ese episodio pero lo niega rotundamente. Gustavo regresa a su casa y comienza a ingerir pastillas para suicidarse, pero sus amigos lo rescatan. Los cinco regresan a Malvinas en una avioneta. Los recuerdos de la batalla invaden a Gustavo y revive el momento en que cada uno de ellos muere. Todo había sido una ilusión. López Cabral rescata a Gustavo que agonizaba en su casa , tras haber ingerido una sobredosis de alcohol y pastillas.