España investiga poco. Nuestra inversión en I+D es del 1,25% del PIB, mientras que la media europea supera el 2%. Algunos de nuestros vecinos casi triplican nuestra escasa apuesta por la ciencia. Somos buenos en deporte, en turismo, en gastronomía… pero despreciamos la ciencia con salarios bajos, con inestabilidad laboral y con falta de oportunidades. A pesar de todo, muchos siguen luchando por lograr avances que nos beneficien a todos. ¿Qué investigaciones punteras desarrollan ahora mismo nuestros científicos? ¿Podemos aspirar a ser una potencia mundial en ciencia? España no encabeza precisamente las listas de los premios Nobel, y los que tenemos, no reciben todo el reconocimiento que merecen. ¿Qué necesitamos para sentirnos orgullosos de nuestros científicos? La vacuna contra el coronavirus llega antes desde países que dedican más dinero a los laboratorios. La investigación les hace más fuertes, más seguros y atractivos para los científicos.