El sexo debe ser divertido, el sexo es un juego. Los adultos tenemos muy pocos momentos en los que se nos permita jugar, pero al igual que en los niños los juegos son una parte muy importante de nuestro desarrollo y crecimiento. Los niños evolucionan a traves del juego y en los adultos ocurre exactamente lo mismo. Si dejamos de jugar algo muere dentro de nosotros por eso siempre debemos mantener vivo al niño que llevamos dentro sobre todo con la práctica de los juegos sexuales.