José recibe un mensaje de texto de Nora (su amante) y después, un ultimatum para que defina su situación y decida qué hacer con su matrimonio. Él, asustado, conversa con su psiquiatra Arturo y le cuenta esta amenaza pero no escucha los consejos que este le brindó. Invita a almorzar a Sofía para blanquear su situación y, sin dar muchas vueltas, le dice que tiene una amante y que esta confesión tan abrupta es para protegerla de Nora. Sin comprender lo que José le decía, Sofía, estalló en bronca, dolor y decepción. No le alcanzaron las palabras para descargar su ira contra él. Como válvula de escape, llamó a su analista Elsa y le contó todo. Esta crisis, fue el detonante para que ambos terapeutas, (Arturo y Elsa), se pongan en contacto con sus pacientes para tener una reunión los cuatro y encontrar una solución al problema. La propuesta de los profesionales, fue comenzar una terapia de pareja. José y Sofía la aceptaron y tuvieron su primera sesión con Clara Lombardo. Allí, volvieron a surgir los reproches y las peleas, pero al culminar el encuentro, ambos decidieron pasar a una segunda instancia…
Sofía se reunió con su madre esperando tener una conversación amena. Como toda madre, con una sola mirada, descubrió que su hija estaba pasando por un mal momento con su marido. Y ahí comenzaron los reproches. Una tregua. Eso le pidió José a Sofía para llevar a adelante una cena con unos amigos armenios, a los cuales les iba a pedir dinero. La cena, fue placentera hasta que un comentario de su mujer, desencadenó, lo que José no esperaba. Una de las esposas de sus amigos, se sintió ofendida por una pregunta íntima que le hizo Sofía sobre su círculo familiar. Esto, más unas copas de alcohol, generaron otra discusión matrimonial, que continuó en su segunda sesión de terapia. La situación es devastadora para ambos. A Sofía, recién “le cayó la ficha” sobre la infidelidad de José. Él, asume que está perdido y que su vida familiar es un desastre. En terapia salieron varios temas a la luz: “los cuernos”, la subestimación y la falta de diálogo. Clara, los escuchó y logró que José, sacara todo lo que lo angustia. Desesperado, resumió toda su desazón en dos palabras. Le pidió a Sofía, que lo “trate bien”.
Todo parecía encaminado, hasta que Nora, apareció sorpresivamente en la empresa de Sofía con la excusa de comprar un regalo. Sin estar preparada para afrontarla, pudo sortear la situación rápidamente pero el encuentro con la amante de su esposo, le provocó una nueva crisis interna y de pareja. Luego, fue a ver a su terapeuta y con bronca y dolor le contó todo. Ahí surgió un nuevo interrogante: ¿Qué pruebas tiene de que Nora sea la amante de su esposo? Después de este mal trago, José y Sofía tuvieron su sesión de terapia de pareja. Ella, sacó el tema “Nora” y exigió una explicación. Clara logró que después de mucho tiempo, se miren a los ojos y se digan la verdad. Él pidió: apoyo y comprensión; ella, que le confirme si Nora era su amante. Él se lo confirmó. Sin poder conciliar el sueño, salió y encontró refugio en un bar. Allí, un amigo la escuchó y entre copa y copa, le contó sus penurias. La noche pasó rápidamente cuando cayó en la cuenta que no había dormido en su casa. Esto, la superó y no dudó en hacérselo notar a José. Pero su pedido de auxilio, no fue para él, sino para su madre, a quién le pidió que la lleve su casa, lejos de su familia…
José acusó a Nora de ser la responsable de que Sofía se vaya de su casa. Esto, lo ayudó para pedirle que se desaparezca de su vida. Mientras esto sucedía, Sofía, estaba viviendo con su madre, para encontrar alguna “respuesta” a todo lo que pasa. Esta ausencia, le generó a José, una necesidad imperiosa de adelantar la próxima sesión de terapia de pareja. Después de acordar el nuevo día y horario con Clara, le avisó a Sofía por teléfono. Ella llegó más tarde de la hora prevista. En ese encuentro, aparecieron por primera vez, otros conflictos internos que afectan la relación pero sobre todo a la familia. Clara encontró que hay falta de comunicación entre ellos y que están repitiendo el modelo de sus padres. Allí, él, le pidió que vuelva a casa, por sus hijos y porque la ama, pero a pesar de este pedido, ella volvió con su madre. Sus hijos, no son ajenos a esta crisis matrimonial. Si bien, demuestran indiferencia a las peleas de sus padres, de a poco van surgiendo señales de que a ellos también les afecta esta situación. Una borrachera de su hijo Damián,cambió abruptamente los planes de Sofía. A pesar de no estar pasando por las mejores condiciones, volvió a su hogar para ocupar su rol de madre y esposa.
En un descuido involuntario, a Hernán se le escapó Roberto, el perro y al único que registra José en su casa. Para colmo tuvo tanta mala suerte, que lo atropelló un auto y lo mató. Todos, sabían que darle esta noticia José no iba ser a muy fácil y fue durante la cena familiar cuando surgió este tema. Erróneamente, él culpo a su hijo, Damián de ser el responsable y terminó generando una nueva crisis familiar. Hernán esperó hasta que su hermano se calme y le contó toda la verdad. En esa charla, dejó en evidencia que hablar con él es difícil. Después de esto, José, fue a un encuentro con Arturo, su terapeuta y desahogó toda su angustia. Por su parte, Sofía, contuvo a Damián de semejante acusación y prometió encontrar el camino para salir adelante. Pero esta nueva pelea, provocó, otra vez, distancia entre ella y José y trajo a la luz, un secreto que hace 18 años tiene guardado. Esto volvió a desequilibrarla y se refugio en su pasado. A través de a una red social de Internet, comenzó a contactarse con sus compañeros del secundario, en dónde casualmente, estaba Carlos su ex novio y ex amante....
Nora sigue cerca de José pero con otra intención: ayudarlo con dinero para sacar adelante la juguetería. Este nuevo "acercamiento" entre los primos y la reunión que organizó Sofía con sus ex-compañeros del secundario, fueron los temas que se hablaron en la sesión de terapia y que arrojaron dos nuevos conflictos en la pareja: Los celos y el temor. Después de escucharlos, Clara, les preguntó: ¿Porqué seguían juntos?... pregunta que no tuvo respuesta... Finalmente, Sofía, se reunió con sus amigos en su casa y a José no le cayó nada bien, porque sabía, que entre los invitados, estaba Carlos, el primer amor de ella. Al principio, José, no iba asistir, pero llegó más tarde y un poco ebrio. En la charla, no dudó en tocar ese tema y de alguna forma le dejó bien en claro a Carlos que Sofía, le “pertenece”. Cuando se fueron los invitados, concluyeron que había un empate de “cenas frustradas” y cuando parecía que se asomaba un torbellino de peleas llegó un fuerte abrazo.
Sofía quedó inmovilizada cuando vio a una amiga de Damián casi desnuda en la habitación de su hijo. Se trataba de Sabrina, una ex profesora de la cual el joven está perdidamente enamorado. Su presencia en la casa, fue suficiente para que Sofía estalle en celos y reconozca la sobreprotección que tiene hacia su hijo. Mientras la convivencia con la extraña transcurría “tranquilamente”, José, comenzó a tener unas fuertes palpitaciones y su médico, le indicó utilizar un “holter” para monitorearlas. En la sesión de terapia, ambos, contaron que tuvieron una noche de amor como en los viejos tiempos. De a poco "la pareja está saliendo adelante", así lo expresó Clara, mientras los escuchaba. Pero cuando surgió el tema “Sabrina”, Sofía y José reconocieron un nuevo conflicto: tienen que comunicarse mejor con los chicos. Al finalizar la sesión, Sofía se encontró con Carlos. Supuestamente, iba a retirar la computadora que éste le había preparado a Damián. Pero a los pocos minutos, la situación se les fue de las manos y un intenso beso cambió el rumbo del encuentro. Ella no pudo darle continuidad e inmediatamente le confesó esa angustia que guarda hace 18 años: “Existe la posibilidad de que Damián sea tu hijo”, le dijo.
La presencia de Sabrina en la casa, despertó más que peleas. La joven, invitó a Helena y a Damián a fumar marihuana y José fue el primero que se dio cuenta de esto. Mientras tanto, Sofía, tenía otro problema por resolver. Decidida a terminar con la incertidumbre, le pidió a Carlos que se realice un estudio de ADN para confirmar si realmente es el padre de Damián. Previo a esto, reconoció su error al guardar este secreto durante tantos años y le aclaró que lo hizo para salvar su matrimonio. La única buena noticia que recibió José fue que había salido la convocatoria de la juguetería. Con lo cual, cambiaría rápidamente la situación económica familiar. Para festejar este cambio, invitó a Sofía a un restaurant . Pero el almuerzo no llegó a buen puerto porque Nora los interrumpió y provocó una gran discusión. Este no fue el único mal momento que vivió José. Al llegar a su casa, se encontró con una imagen que jamás se imaginó: su hija Helena y Sabrina, estaban casi desnudas encerradas en su habitación.
Sofía tomó “el toro por las astas” e intentó hablar con Helena para ayudarla y entender la situación. Pero fue en vano, la joven, estalló en gritos y su madre terminó pegándole una cachetada. Después de esto, la joven se fue de la casa junto a Sabrina y José culpó a su esposa de ser la responsable. Esta crisis familiar, la conversaron con Clara . Allí Sofía confesó que quiere abandonar la terapia de pareja para avocarse totalmente a sus hijos, porque siente que ellos la necesitan. Buscando una respuesta que ayude a comprender "el trabajo de su hija", José, encontró en la computadora de la joven todos los registros de su actividad en internet y vio la foto de un hombre que estuvo en contacto con ella. Esa imagen, no se la pudo quitar de la cabeza y descubrió que ese tipo es un paciente de Arturo a quien le pidió que le pase sus datos para denunciarlo. Sabrina fue quien se comunicó por teléfono para pasarles la dirección del lugar donde estaba Helena, también les pidió perdón por lo que había sucedido. Después de esto, el matrimonio, fue a buscar a su hija para pedirle que regrese a su casa.
Sofía recibió la noticia que menos deseaba: el resultado del ADN reveló que Carlos es el verdadero padre de Damián. Después de semejante noticia, se encontró con su ex novio para comunicárselo y, presos de la angustia, ninguno de los dos sabe cómo seguir con esta situación. Sofía siente que no puede enfrentar a su marido y decirle la verdad. Es por eso que en la sesión de terapia con Sofía le dijo a José que tomó una decisión: quiere separarse. Pero no sólo ella vive una situación difícil, a José se le complicó más su situación en la juguetería. Después del allanamiento en el departamento de los Chocakilian, la policía registró también el negocio familiar. El abogado le dijo a José la identidad del acreedor que lo traicionó denunciándolo a la policía: Nora, su despechada ex amante. Entonces fue a buscarla muy alterado para exigirle explicaciones pero el encuentro se tornó violento y él terminó con un corte en la cara.
Todas son malas noticias para José. La policía le clausuró e inhabilitó la juguetería. Pero eso no es todo, quedó detenido momentáneamente y después logró salir, pero bajo libertad condicional. Toda esta situación lo desbordó y le quitó las fuerzas para seguir adelante, sobre todo, con la terapia de pareja. En su encuentro con la terapeuta, Clara y con Sofía confesó estar cansado de todo y que ahora quiere separarse. Mientras él atraviesa esta crisis emocional y económica, Sofía intenta darle fin al tema de la paternidad de Damián. En una charla con Carlos, reconoció que le cuesta afrontar esta situación y que antes de decirselo a Damián, lo tiene que saber José. Sin encontrar una solución concreta a los problemas y tratando de encontrar un momento de felicidad, José, reunió a toda su familia y los llevó hasta la juguetería. Atrás quedó la clausura del local y una vez adentro improvisó un brindis para valorar que a pesar de todo están juntos.
En este capítulo, José, recibió el golpe más duro de su vida. Sofía le confesó en la terapia de pareja que Carlos es el padre Damián y que fue concebido cuando ellos, estaban peleados hace 20 años atrás. Lógicamente esta noticia, lo tomó por sorpresa y sin entender porqué se lo había guardado todo este tiempo, decidió armar las valijas para irse de su hogar. También buscó ayuda en su terapeuta Arturo y en Nacho, un viejo amigo con el que se reencontró y a quién le contó la crisis que estaba atravesando. La bronca y la angustia lo superan. Siente que Sofía le disparó en la cabeza y cree que nunca se lo perdonará. De lo único que está seguro, es que él mismo se lo comunicará a Damián, asi se lo aclaró a Carlos en un encuentro cara a cara que tuvieron en un bar. Para Sofía tampoco fue fácil esta situación y tampoco sabe cómo salir adelante. Esta crisis “desmoronó” todo lo que había ocultado, pero en una charla con Elsa, su psicóloga, reconoció que el silencio que mantuvo, fue para no perder a José.
José y Sofía cada vez están más distanciados. En este capítulo, él comenzó a buscar trabajo, se presentó a un par de entrevistas, pero no consiguió buenos resultados. Su amigo, Nacho- que conoce cuál es la situación por la que está atravesando- le ofreció trabajar en su restaurant como “maitre" y además, le propuso quedarse a vivir en su departamento. José no aguanta más esta situación ya no quería fingir delante de su hijo todo lo que tenía guardado. Por eso, presionó a Sofía para que una vez por todas, le diga la verdad a Damián. En la terapia de pareja, ella, admitió que sola no podía afrontar esta situación y junto a la terapeuta, definieron cómo se lo iban a decir. Ambos sabían que no iba a ser fácil, pero ya era insostenible. Con el apoyo de su hija Helena , hablaron con Damián y estalló una nueva crisis en la vida de los Chocakilian. El joven, envuelto en llanto y dolor, exigió explicaciones y al enterarse que su padre biológico es Carlos, comenzó a insultar a Sofía. Ante esta reacción, José, trató de calmar las aguas y ella pidió perdón a todos, pero por el momento fue inútil...
José decidió irse a vivir a al departamento de su amigo Nacho y comenzó a trabajar como maitre en su restaurant. Ambas situaciones fueron difíciles para él. Sobre todo porque, al volver a trabajar, tuvo que lidiar con un grupo de empleados con los que tuvo algunos “roces”. Por otro lado, Sofía, recibió la visita de una amiga española que ni bien se enteró de la reciente separación, la invitó a salir a bailar. Juntas terminaron en un karaoke en donde ella se cruzó casualmente con Mauricio, el barman del bar del que ella es habitué. Finalmente, Damián, "aflojó" un poco y se acercó a su madre. Después de una profunda charla y un poco más tranquilo, le pidió que organice un reencuentro con Carlos, al que ella accedió. Con la verdad sobre mesa y por primera vez, padre e hijo, comenzaron a conocerse. A la sesión con Clara, Sofía y José, llegaron separados. Allí la terapeuta, les propuso ocuparse de sus hijos y les brindó ese espacio para que la terapia de ahora en adelante sea familiar...
José comenzó a ir al gimnasio y allí conoció a Denise, una joven y atractiva personal trainner con la que rápidamente tuvo buena onda. Ella, se sintió atraída por él y no tardó en acercarse. Por la noche, apareció sorpresivamente en el departamento de José e improvisó una cena juntos. Todo transcurría tranquilo hasta que Damián llegó y se encontró con la nueva “visita”. Por otro lado, Sofía aceptó tener una cita con Mauricio el barman del bar que frecuenta, pero la situación se les fue de las manos. Lo que parecía un simple encuentro, terminó siendo una noche de pasión, de la que parece, Sofía no se arrepintió.... José no tardó en enterarse de esto y otra vez –a pesar de estar distanciados - volvieron a discutir. Lógicamente, este tema apareció en el encuentro con Clara, pero no llegaron a resolverlo porque la sesión se vio interrumpida por la llegada de Helena y Damián. Por primera vez, los cuatro, se sentaron a hablar de las cosas que no pueden decirse en otro contexto. El primero en romper el hielo fue Damián...
Denise convenció a José para que cambie su look y fueron juntos a comprar ropa. De casualidad, en el mismo local se encontró con Sofía que estaba acompañada de su amiga Caro . Fue en ese lugar, donde conoció a la nueva amiga de José e inevitablemente sus celos se hicieron evidentes. La personal trainner se siente totalmente atraída por él y no dudó en confesárselo. La joven no pudo contener sus impulsos y después de proponerle intentar formar una pareja le robó un beso que lo dejó sin palabaras... Por la noche, Sofía, festejó su cumpleaños número 47 y organizó una fiesta en su casa. A la misma, invitó a Mauricio para que prepare los tragos. Al que no invitó, fue a José, pero igual apareció sorpresivamente y allí conoció al barman. Verlo en su propia casa, le provocó tanta bronca que enseguida lo encaró y le puso “los puntos”. Mientras todos disfrutaban de un show de magia en living, Sofía se acercó hasta donde estaban y frenó la situación. Este escándalo, más el encuentro en el local de ropa, hicieron que los dos decidan terminar con las sesiones de pareja. Cansados de vivir peleados y haciéndose daño, le plantearon a Clara finalizar con la terapia....
José invitó a Denise a su sesión de terapia con Arturo. Allí, la joven y el profesional, se conocieron y ella manifestó todas sus sensaciones con respecto a su relación con José. Además, en su relato, confesó haber tenido un intento de suicidio durante su adolescencia y entre otras cosas, que se realizó un aborto. Al finalizar el encuentro, Arturo, descubrió un cierto desequilibrio emocional en Denise pero de todas maneras, le pidió a José que vaya despacio… Por su parte, Helena y Nacho están más enamorados que nunca y ya no quieren ocultarlo. Ambos decidieron dar un paso adelante y anunciarle a toda la familia lo que les pasa. El momento elegido, fue una cena organizada por Sofía. Nacho, llegó sorpresivamente a la reunión familiar y ahí sin “anestesia” contó que estaba saliendo con Helena. Como era de esperarse, a José no le gustó nada y reaccionó a los gritos con su amigo. Después, intentó hablar con Helena pero fue en vano. Los dos están enamorados y a José le costó aceptarlo. Esta noticia - más el quiebre de la juguetería, la separación con Sofía y la reciente noticia de que no es el padre de Damián, terminaron por provocarle un pre infarto.
El matrimonio retomó las sesiones de pareja con Clara y durante la misma, Sofía, recibió una inesperada llamada: su madre tuvo un derrame cerebral y está muy grave. Esta noticia la obligó a viajar de urgencia a Madrid. Después de esto, José, volvió a su hogar para -de a poco- recuperarse del pre infarto.Como era de esperarse, su regreso no fue fácil porque se volvió insoportable con todo y con todos. Mientras la familia se reacomodaba, Helena comenzó a tener nauseas y después de hacerse un test de embarazo confirmó sus sospechas. El test, dio positivo y enseguida fue a contárselo a Nacho, el padre del bebé. Desafortunadamente, la reacción de él no fue la que ella esperaba y esto le generó más miedo del que tenía. Totalmente angustiada y sin poder comunicarse con nadie, se apoyó en su hermano Damián para contarle lo que le estaba pasando. Más tarde, Nacho entró en razones y fue buscarla para decirle que se iba a hacer cargo del bebé y además que se lo iba a decir a José. A pesar de su intento, fue en vano, José no quiso escucharlo. Después con el apoyo de Damián y Hernán, Helena tomó coraje y se lo comunicó a su padre…
Sofía sigue en España y José volvió a su hogar para recuperarse de a poco de su pre infarto. Instalado en su núcleo familiar, logró acercarse un poco más a sus hijos. Primero, tuvo una profunda charla con Helena, que después de haberle dado la noticia de su reciente embarazo se sintió llena culpa y le pidió perdón. La joven, casi sin entender lo que le está pasando y con un poco de temor habló con su papá. Éste la aconsejó y le aseguró que en esta nueva etapa, toda la familia estará a su lado. Damián también tuvo un mano a mano con su padre. El joven, se animó a hablar de todo sobre todo de cómo vivió el momento en el que se enteró que Carlos era su verdadero padre. Mientras tanto, los tres terapeutas: Clara, Elsa y Arturo se reunieron para ayudar a Sofía y a José. Durante la charla, intercambiaron las diferentes experiencias que tuvieron con sus pacientes en las últimas sesiones. Y como era de esperarse, surgieron los conflictos más fuertes que atravesaron los Chokiklian. Al finalizar el encuentro, llegaron a varias conclusiones, pero la más importante fue que el vínculo y el amor que se tienen, es más fuerte que cualquier crisis familiar...
Sofía regresó de España para velar los restos de su madre en Argentina. José, la acompañó incondicionalmente en todo momento y la ayudó a resolver los trámites del velorio. Éste, fue uno de los momentos más tristes que le tocó asumir, sobre todo, porque recibió la sorpresiva visita de su padre, Moncho, con quien estaba peleada y a quien no veía hace muchos años. En este inesperado reencuentro, Sofía sacó todo lo que tenía guardado adentro y estalló en reproches y en reclamos hacia su padre. Éste no se quedó atrás y trató de alguna manera hacerle entender que su regreso, fue para acompañarla en este triste momento y para recuperar ese tiempo perdido. Por otro lado, Helena fue la que le dio una alegría en medio de tanto dolor. La joven tomó coraje y le contó Sofía que estaba esperando un bebé de Nacho. Esta mezcla de reencuentros y sensaciones hizo que Sofía le proponga a José que vuelva a vivir en el departamento familiar para juntos, intentar salvar la pareja...
En este capítulo, Nacho le propuso a Helena casamiento. La joven aceptó, pero a los que no les gustó mucho la idea, fue a Sofía y José. Por su parte, Moncho tuvo una seria charla con Nacho y le advirtió que si le hacía algo malo a su nieta, él se va encargará de “hacer justicia”. La muerte de Mecha y la llegada de Moncho provocaron en Sofía muchos cambios de actitud. El principal, fue retomar el diálogo con su padre. Ambos, comenzaron a recordar los pequeños buenos momentos que compartieron años atrás. En sus charlas no faltó, la bebida, uno de las pocas cosas que tienen común. Por otro lado, el matrimonio decidió volver a los encuentros de terapia con Clara. Durante la sesión, surgieron todos los temas que pasaron en este último tiempo. Puntualmente, José, le exigió a Sofía que se deje “tocar” por la vida, por los buenos y malos momentos que le toca vivir. También le pidió se saque la “careta“–por lo menos ante él- y que deje de beber en exceso. Al finalizar la sesión, ambos le confirmaron a Clara que quieren volver a intentarlo. Por último, llegó el momento de despedir los restos de Mecha. Todos juntos, se trasladaron a orillas del rio y allí, encabezados por José, tiraron las cenizas. Pero esa no fue la única despedida, Moncho, también lo hizo, con un fuerte abrazo, le dijo hasta luego a su hija.
Finalmente, Helena decidió abandonar el hogar familiar para formar su propia familia. Esta noticia enfureció a José porque cree, que no lo hace por amor y que su amigo, Nacho, la está obligando a separarse de ellos. A raíz de una fuerte discusión con su hija, José, comenzó a recordar los enfrentamientos que él tuvo con su padre cuando pasó por la misma situación. Sofía también recordó aquellos momentos difíciles que tuvo que afrontar con su suegro, pero de todas maneras, fue la que aceptó la decisión de Helena y la apoyó. Además de estos recuerdos, José, recibió un sorpresivo llamado de su tía Évelyn, (ex amante de su padre y ex gerenciadora de la juguetería). Ella se contactó con los hermanos Chokiklian para entregarles un dinero que su padre les dejó. Hernán no fue al encuentro porque no le perdona el amorío que tuvo su con padre. Estos recuerdos invadieron a José provocándole una profunda angustia y dolor. Angustia que no pudo manifestar en la sesión de pareja con Clara. Fue a su terapeuta, Arturo a quien le confió los recuerdos más angustiantes que le tocó vivir. Después de este desahogo, José comprendió la situación por la que estaba pasando su hijita y al igual que Sofía, aceptó su decisión.
En este capítulo, las mujeres, hicieron un llamado atención a sus respectivos hombres. Por un lado, Sofía, le reclamó José – en la terapia de pareja con Clara- que preste más de atención a lo que pasa en la intimidad. La distancia sexual que existe entre ambos la preocupa y fue el tema que detonó en la sesión y del que él no quiso hablar en ese contexto. Por otro lado, José, comenzó a tomar clases particulares de cocina armenia, con Izabella una joven chef de la misma comunidad. Si bien, esta actividad, había sido consensuada, la presencia de esta “nueva profesora”, no le gustó nada a Sofía y sus celos no tardaron en aparecer. Helena también hizo “catarsis”. Como se lo habían advertido sus padres, la convivencia con Nacho no iba a resultar nada fácil. Él es muy “machista” y en esta oportunidad, un viaje de negocios, provocó en Helenita una fuerte de crisis y en consecuencia, una pelea llena de reclamos. Al enterarse, sus padres, no dudaron en acompañarla y en ayudarla, pero para su sorpresa, en un acto de madurez, la joven, decidió hacerse cargo de sus problemas de pareja y decidió resolver sus diferencias con Nacho sola.
José se enteró que su hermano, Hernán, estaba viviendo en su auto y esto lo alteró, porque no puede creer, cómo puede vivir en esas condiciones. Además de la vergüenza que le generó, tuvo una fuerte discusión con él, en la cual se dijeron de todo. Este episodio, le provocó nuevamente un fuerte dolor en el pecho, que lo llevó a realizarse un chequeo en el hospital. Para su sorpresa, allí se encontró con Denise. La joven, se había intentado suicidar y estaba internada para recuperarse. José, al verla, la acompañó y en una charla amena, descubrió que ella lo acusa de ser el responsable de su intento de suicidio. Actitud que también lo descolocó, pero teniendo en cuenta el desequilibrio de ella, "la comprendió". Después de verla, le pidió que por favor, no lo acuse de ese terrible flagelo. Como si esto fuera poco, Helena, volvió momentáneamente al hogar familiar y allí manifestó la gravedad de la crisis que está viviendo con Nacho. José y Sofía, la apoyaron como siempre y le propusieron que asista con ellos a la terapia de pareja con Clara, para tratar de ver las cosas desde otro lugar. Estas situaciones que vivió José, lo dejaron sin rumbo, y sus reacciones tampoco lo ayudaron. Como siempre, buscó respuestas en Arturo, quien dejó al descubierto, la sobreprotección que ejerce él en sus seres queridos. Después de este encuentro, José reflexionó y se reconcilió con su hermano.
Los hijos no dejan de sorprender al matrimonio Chocaklian. En esta oportunidad, una mujer, llamada Mabel, se presentó en la casa de ellos, adjudicándole a Damián la paternidad de su nieto, de tan sólo un mes de vida. Esta noticia, sorprendió a todos, pero no tanto a Damián, que reconoció haber tenido un encuentro ocasional, con Paloma (la hija de Mabel). Como era de esperarse, Sofía y José, hablaron con su hijo y trataron de tranquilizarlo y contenerlo. Después, accedieron a conocer a la familia de la chica y en una charla profunda, descubrieron que existe la posibilidad de que Damián no sea el padre del bebé. A pesar de las dudas, los Chocaklián, se trasladaron a Morón para conocer al niño y allí, José, propuso que los chicos se hagan un estudio de ADN, para conocer la verdad. Este acontecimiento y el reciente embarazo de Helena, provocó en Sofía y en José, nuevas inquietudes sobre su rol como padres. En su encuentro con Clara, Sofía manifestó ser “una madre precaria” y sentir culpa, al no reconocer que sus hijos están grandes y que en este tiempo “en algo falló”. En cambio, José, fue más práctico y reconoció que estos cambios son parte de la vida.
José, puso en marcha su emprendimiento y organizó una degustación de comida armenia en su casa. A la reunión, asistieron a sus amigos, a quienes les ofrececió ser parte del negocio. Hernán, aprovechó la ocasión e invitó a su novia Laura para presentársela a toda la familia. Todo marchaba tranquilo, hasta que un invitado, provocó la ira de José, después de bromear sobre la virginidad de Hernán. Esto, fue suficiente para que el encuentro termine en una fuerte discusión. Mientras José trataba de ayudar a su hermano a superar este mal trago. Una buena noticia conmovió a la familia. Damián, fue a buscar los resultados del ADN y confirmó su paternidad. Tan fuerte fue esta novedad, que Sofía no supo cómo afrontarla y volvió a beber. Por otro lado, Helena le propuso a Nacho comenzar terapia de pareja como lo hacen sus padres. Sin muchos ánimos, él aceptó asistir al primer encuentro y ahí salieron a la luz, los principales problemas que hay entre los dos. Sofía quiere ayudar y acompañar a su marido en este nuevo emprendimiento. Para ello, le ofreció ser su capitalista y le propuso inaugurar un restaurant de comida armenia en la casa de su madre. Al principio, José, no se mostró muy convencido, pero en el encuentro con Clara, prometió analizar la propuesta...
Damián y Gisela, decidieron bautizar a Jeremías. Esto, generó un nuevo conflicto en la familia, ya que la mamá del bebé quería que la ceremonia se realice bajo la religión evangélica. José, no estaba de acuerdo y quería que sea bautizado bajo la tradición armenia. Damián no se impuso ante el deseo de su padre y finalmente, la ceremonia se realizó como estaba planeado. Ante esto, José, no se quedó quieto e intentó por todos los medios trasmitirles a su nieto y a todos los presentes, “su sangre armenia". Para ello, preparó comida autóctona y en el medio del festejo familiar, improvisó un baile con música típica. Mientras todos festejaban esta bendición, Hernán había preparado, un almuerzo romántico para sorprender a Laura, su novia oficial. Todo marchaba, perfecto hasta que ambos se dejaron llevar por la pasión. Pero en ese momento, Hernán, se sintió como un adolescente que se esconde de sus padres y no pudo seguir adelante. En el fondo siente que ella se merece alguien mejor. Por otro lado, Helena y Nacho asistieron a su primera terapia de pareja (con el profesional que les recomendó Clara). Este encuentro, fue difícil para los dos. Sobre todo para él, que se mostró bastante nervioso. Durante la charla, comenzó a revelar secretos de su pasado, entre ellos, la complicada relación que mantuvo con su madre, durante su adolescencia.
En este capítulo, el pasado, se hizo presente en la vida de Sofía y José. Ella recibió la sorpresiva visita de su medio hermano Ezequiel, hijo de Moncho, con su segunda mujer. Este reencuentro inesperado, trajo a luz, varias cuestiones del pasado. Ezequiel, apareció después de mucho años, con la excusa de “recomponer” la distante relación que hay entre los dos.Pero al poco tiempo, dejó ver su resentimiento por un accidente que vivieron cuando eran niños. Además le reclamó, un parte de la herencia de Mecha. Por otro lado, José tuvo su primer evento gastronómico para un importante hombre de la comunidad armenia. Sofía lo ayudó y cerró el presupuesto telefónicamente. La fiesta, sucedía con total normalidad, hasta que apareció Norita, su ex amante. José, sorprendido, trató de que esa mujer no le arruine su primer negocio, pero fue inevitable. El despecho de Nora fue más fuerte y después de varias copas, le hizo un escándalo delante de todos los invitados. Ambas situaciones, la llegada de Ezequiel y la repentina aparición de Nora, fueron los temas que trataron en la sesión de pareja con Clara. Allí la terapeuta, les propuso, repensar a cada uno en su pasado y hacerle frente.
Cuando la venta de la casa de Mecha estaba por concretarse, Sofía, se dió cuenta de la "movida" que hizo su medio hermano. Ezequiel, al enterarse que había mucho dinero de por medio, embargó el 50 % de la venta de la propiedad. Sofía al descubrir esta jugada por medio de la escribana, se llenó de bronca, porque él, no se lo dijo de frente e inventó un supuesto acercamiento familiar. Ante esta indignación José, ofició de mediador y logró que las cosas no pasen a mayores. Finalmente, su medio hermano, apareció una mañana (después de una larga noche )y confesó la verdad de su insistente reclamo: el juego. En los últimos años, se convirtió en un jugador empedernido que lo llevó a endeudarse y a recibir amenazas para que pague el dinero que debe. Esto, terminó por conmover a Sofía quien aflojó y dejó “esta guerra” absurda a un lado. Después de varias idas y venidas, la venta se efectuó y cada uno se quedó con su mitad. La de Ezequiel fue depositada en una cuenta bancaria a nombre de Moncho y la de Sofía fue guardada en un rincón del baño de la casa. Pero los problemas no terminaron ahí. Un desperfecto, en una cañería, provocó una inundación en el toilette y los billetes terminaron flotando en el agua…
Desde que comenzó el negocio de catering, José, no para de trabajar. Entre los pedidos y sus clases de cocina con Izabella, dejó un poco de lado a Sofía, que está pasando por un mal momento. En este envío, ella fue estafada por Caro, su socia de la empresa y esto, más la indiferencia de José, la llevaron a caer nuevamente en la bebida. Todos estos problemas, la desestabilizaron, a tal punto, que también se desquitó con una escena celos hacia José. No soporta verlo todo el día con Isabella (la profesora de cocina). Por otro lado, Helena y Nacho asistieron a su primera clase de yoga para embarazadas. Al principio, él se negó pero después, la acompañó. Durante la clase, se mostró bastante molesto y terminó por irse antes de que termine. Helena se enojó bastante con él. Otro de los que se dejó vencer por otra adicción, fue Hernán. Después de ver a Laura en una plaza, hablando con su marido, entró un pozo depresivo y volvió a darse un atracón con la comida. Ella, trató de explicarle que lo que vivieron juntos existió, pero que el vínculo que la une al padre de su hijo, es más fuerte.
Damián le comunicó a sus padres que se va a vivir solo. José, fue el primero en enterarse y el primero en apoyarlo. Sofía no lo pudo aceptar. La noticia, fue el detonador de una angustia que venía gestado desde las últimas situaciones que vivió. El joven, en un acto de madurez, decidió comenzar su nueva vida y para ello, le pidió a Helena que lo ayude económicamente. Cuando José, se enteró de esto, se enojó con su hijo y con Nacho (que se ofreció como garante) porque cree que lo hace apropósito, para "pasarlo por encima". Tratando de buscar un alivio a todo lo que le pasa, Sofía volvió a caer en el alcohol. En un estado de desesperación comenzó a beber y Rosa, su empleada, se dio cuenta enseguida. La angustia de Sofía fue tal, que habló con Elsa para abandonar su terapia personal. Mientras José esperaba a Sofía para tener su sesión de terapia de pareja, ella estaba manejando el auto bajo los efectos del alcohol. José comenzó a sospechar de su impuntualidad, hasta que un llamado de Rosa le advirtió, que Sofía no estaba bien…
José comenzó a buscar a Sofía por todos lados. En primer lugar, llamó a Elsa, la terapeuta de su mujer, para saber si tenía noticias y nada. También, se acercó al bar que Sofía frecuenta y habló con el barman, con el que ella tuvo un affaire meses atrás. Allí, el joven, le explicó que la había visto con algunas copas de más y que en un descuido, desapareció del bar. Para sorpresa de José, el joven, le entregó el anillo de casamiento, que Sofía se había olvidado en la mesa del bar. La desesperación de José fue tan grande que empezó a revisar sus papeles para ver si encontraba algún dato, pero no había nada, sólo unas servilletas, con algunas líneas escritas sobre sus pesares, en donde dejaba ver, un cierto "hartazgo" sobre él. Todos estos indicios, generaron una terrible angustia en José. Angustia que trató de canalizar en Arturo su terapeuta. Mientras tanto, Sofía seguía sin aparecer. Damián, también estaba preocupado por su madre. Pero él, en todo este tiempo, elaboró su propia teoría: el culpable de todo era José. Su bronca e indignación no tardaron en aparecer y en una charla de padre a hijo, se dijeron todas las cosas. Finalmente, un llamado inesperado, les comunicó lo peor: Sofía había sufrido un accidente en automovilístico.
Sofía estaba internada en un hospital a unos kilómetros de la Buenos Aires. José, Hernán, Helena y Damián se trasladaron hasta allá para ir buscarla. En el camino, tuvieron un desperfecto en el auto y esto los detuvo unas horas en una estación de servicio. Allí, los nervios y la ansiedad de ver a su madre con vida, le provocaron "pérdidas" a Helena . Ante este susto, la joven optó por no contarle nada a su padre hasta que lleguen al pueblo. A pesar de los obstáculos, lograron llegar al hospital. Ahí, José se reencontró con Sofía, pero fue un encuentro “extraño”. Él, no pudo disimular el dolor que le provocó, encontrar los secretos que escondía su mujer. Si bien, no era el momento el adecuado para hablar de eso, se replantearon, cómo seguir con su relación. Mientras, Helena acompañaba a su familia, Nacho, tuvo su primer sesión de terapia. Por muy buenas referencias, llegó hasta el consultorio de Arturo, desconociendo que era el mismo terapeuta que atiende a José. En este primer encuentro, se dejó llevar por las preguntas del profesional y en seguida confesó que lo que más lo perturba en la vida es la familia de su mujer…
En este capítulo sucedieron muchos cambios en la vida de los Chokaklian. Después del accidente, Sofía y José vendieron su casa y le compraron un nuevo departamento a Damián. A su vez, ambos, se mudaron a una casa más grande para ellos solos. Como era de esperarse, la mudanza no fue sencilla. Para ella, fue como empezar una nueva vida, en cambio para él, todo fue muy extraño. La primera noche juntos, lejos de sus hijos fue atípica. Ambos se encontraron rodeados de un silencio que por lo menos a José lo incomodó bastante. Pero Sofía, encontró la manera de que sea diferente. Durante la mudanza, encontró un “porro” entre las pertenencias de Damián y le propuso a José compartirlo. Éste, al principio se resistió y no le pareció una buena idea. Pero al cabo de unos minutos, ya era un hecho. El relax y las risas invadieron el espacio y las confesiones fueras del diván también. En su encuentro con Clara, Sofía manifestó sentirse más tranquila en la pareja y que lo “peor ya pasó”. En cambio José, se mostró frío y desesperanzado. De alguna manera, lo aterra el silencio que existe entre los dos. Ante estos distintos puntos de vista, la terapeuta, les propuso, que pase lo que pase, que sea lo que ellos decidan...
La felicidad, llegó a la casa de los Chokiklian. Finalmente, José, logró inaugurar su restaurant de comida armenia y lo hizo con el apoyo de toda su familia. Esta inauguración, tuvo su momento máximo de felicidad, cuando apareció su hijo Damián, con quien no se hablaba hacía varios meses. El joven, volvió para recomponer la relación con su padre, pero no pudo contarle que se ganó una beca para estudiar en Francia por un año.Esta noticia, sólo se la confió a Gisela y Sofía, quien se mostró sorprendida y dispuesta a ayudarlo en lo que sea. Mientras, la familia se recomponía de a poco, Helena, comenzó a tener contracciones. A pesar de la disconformidad de Nacho y de su padre, tuvo al bebé en la casa de sus padres. Este nacimiento, revolucionó a la familia porque, además, después de mucho tiempo, José y Nacho se amigaron.
Damián tomó coraje y le contó a toda la familia que se ganó una beca para estudiar durante un año en Francia. A José esta noticia le cayó muy mal, porque le cuesta vivir lejos de sus seres queridos. Con todo el dolor del mundo, terminó aceptando la decisión de su hijo y tuvieron una despedida muy emotiva. Después de la mudanza, Sofía y José, comenzaron una nueva vida en la que la distancia y el silencio se adueñaron de su desgastada relación. Una vez más, las diferencias que existen entre los dos se hicieron evidentes y cada uno por su lado, reflexionó en continuar o no con su matrimonio. En una cena íntima, José tomó la iniciativa y sin anestesia le preguntó: "¿Qué vamos a hacer?". Él, le planteó que ya no queda nada por rescatar, ni por hablar y menos, algo que los una. Ella en cambio, se mostró más positiva e intentó rescatar aquello que los unió hace 27 años. Después de esta charla, adelantaron su encuentro semanal con Clara y allí le manifestaron la decisión que tomaron. ¿Los motivos? Para José, el tiempo, el cansancio, los intentos fallidos, el resentimiento que le dejó el tema de Damián, las traiciones y muchas cosas más, pesaron más que el cariño que se tienen. Ella -un poco más optimista- reconoció que en la nueva casa “no se pudieron encontrar” y que la distancia que existe, tomó un peso más importante en su relación. Ambos, con mucho miedo a lo que se viene, concluyeron que llegó el fin de la relación…
La llegada de la Navidad despertó muchas emociones en todos los Chokaklian. Finalmente, Damián regresó al país, luego de una larga estadía en Francia. Esto motivó el reencuentro del ex matrimonio. El hecho de volverse a ver, movilizó mucho a los dos. Con esta excusa, Sofía, le propuso a José juntarse en familia para pasar las fiestas. Él no se mostró convencido con la idea y le termina diciendo que las pasará con Hernán trabajando en el restaurant. Llegó la noche buena, y Damián la pasó con la familia de Gisella. Helena decidió acompañar a su madre junto con su hija y dejó a Nacho en su restaurant. Por otro lado, Hernán recibió la visita sorpresa de Laura (su ex-novia) y la reconciliación entre ambos se volvió inevitable. Después del brindis, José dejó sus diferencias de lado y decidió saludar a Sofía. Sorpresivamente apareció en la casa de ella junto con su perro. Como en los viejos tiempos, y recordando buenos momentos, la invitó al cine y dejó abierta una posible reconciliación...