Corría el año del 1962 cuando cumplí 12 años y mis pechos empezaron a crecer. Cecilia, mi hermana, se fue a estudiar a París; yo me quedé sola con mis papás y sus problemas; descubrí que los pechos volvían locos a hombres y mujeres, mientras las míos empezaron a llamar la atención de mis amigos, sin que los adultos se dieran cuenta que yo también necesitaba un brassier.
No lists.
No lists.
No lists.
Please log in to view notes.